Siempre que llego evidencio una parroquia abarrotada de personas
de todas las edades a quien se les nota la fé y la determinación de estar allí para
recibir la palabra de Dios, personas con un optimismo Y amor a las cosas de
nuestro señor, como en pocos lugares se puede palpar. El responsable de esta
situación, un hombre sencillo de estatura normal, pero con un carisma inmenso y
un especial don de líder que lo hace muy importante para los feligreses de su
parroquia y para todo aquel que tiene la posibilidad de conocerlo, me refiero
al sacerdote Humberto majé.
El padre Humberto como lo
llaman sus feligreses no solo sabe llevar la palabra de Dios a través de sus
sermones cargados de mensajes positivos
y ejemplos claros para ser un buen cristiano; El padre Humberto practica
con su comunidad la palabra de Dios, asumiendo siempre la posibilidad de
compartir de dar y permitir que otros hermanos tenga la posibilidad de tener
algo para dejar de sufrir o al menos ayudar a que alguien tenga una vida mejor.
Es así como luego de haber
visitado a la familia los niños Yusmira y Cesar Díaz que fallecieron al parecer por
leptospirosis el pasado mes de octubre, noticia que recorrió el país entero y
Conmovido por la realidad que palpo en
esa familia además del dolor y la tristeza, se comprometió de manera espontanea
con la familia integrada por el señor CESAR DIAZ OROZCO y sus seis hijos restantes a construirles una vivienda digna, empezando
una vez más a motivar a las personas de su comunidad parroquial para que entre
todos aportando desde su pobreza pero con mucha generosidad se pudiera realizar
esta bella obra.
Fue así como el pasado 20 de
noviembre en una solemne Eucaristía presidida por el padre HUMBERTO y la
asistencia de la comunidad parroquial, a promesa se hizo realidad, la familia
del señor CESAR recibió una vivienda nueva, la misma que fue construida con los
ladrillos y otros materiales que donaron los feligreses los mismos que
aportaron dinero e incluso la obra de mano, todo con tal de cumplir la promesa
de su pastor y una vez más hacer real la palabra de Dios compartir un poco de
lo mío para dar esperanza y felicidad a otro hermano, sin esperar nada a
cambio, tan solo para ayudar.
Así es Humberto Maje un ángel
que el todo poderoso envió a la comunidad del sur de Malambo, donde desde su
llegada se noto el carisma y la entrega con la comunidad que lo acogió con
esperanza y determinación, sus obras y acciones de la mano con sus feligreses
se notan desde el arreglo de la misma parroquia, hasta la capilla de la luna,
las tres casas construida a familias pobres de Malambo, con recursos de gente
no mas acomodados, pero si muy ricos en la Fé y el amor a Jesucristo y en la de su representante anta la
comunidad, un ángel que entre sotanas y obras de caridad, ha fortalecido la fe
y regresado la esperanza a un gran sector del municipio, para la bendición de
Dios.
Alex Miranda Ch
Periodista
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